En entrevista en el programa de IACLE de Franja TV, el Dr. Roberto Estrada, optometrista guatemalteco, compartió su experiencia en la adaptación de lentes esclerales, una alternativa de alto valor clínico para casos complejos como ametropías elevadas, ectasias corneales y ojo seco severo. Su recorrido revela no solo la evolución de esta tecnología, sino también la necesidad de liderazgo profesional y formación continua en contactología especializada.
Una solución para casos donde otros lentes fallan
Los lentes esclerales se caracterizan por su gran diámetro (14 a 24 mm) y su apoyo en la esclera, evitando el contacto directo con la córnea. Este diseño permite generar un reservorio lagrimal que protege, hidrata y mejora significativamente la visión, especialmente en ojos con irregularidades corneales o con severa deficiencia de lágrima. Como lo explica el Dr. Estrada, estos lentes han permitido a pacientes con síndrome de Sjögren o trasplantes corneales recuperar su funcionalidad visual y calidad de vida.
De vidrio soplado a impresión 3D: evolución que mejora la adaptación
La historia de los lentes esclerales inicia con el vidrio soplado y materiales como el PMMA, que limitaban su uso por la escasa oxigenación. Sin embargo, desde el año 2000, el desarrollo de materiales de alto Dk ha permitido redescubrir su potencial. Hoy, gracias a diseños personalizados, tecnología de impresión 3D y herramientas como OCT de segmento anterior o perfilometría, los lentes esclerales se fabrican con precisión milimétrica, adaptándose incluso a escleras con toricidad.
El desafío profesional: conocimiento, honestidad y seguimiento
Aunque la tecnología es cada vez más accesible en Latinoamérica, el éxito en la adaptación depende de la formación del profesional. Para el Dr. Estrada, la clave está en tres pilares: capacitación constante, comunicación honesta con el paciente sobre tiempos y expectativas, y seguimiento riguroso para garantizar estabilidad y confort. Con más de 100 adaptaciones en solo cinco meses y un bajo índice de garantías, su experiencia demuestra que con dedicación, los resultados positivos son alcanzables.
Una responsabilidad creciente
En un contexto regional con millones de pacientes potencialmente beneficiados —como aquellos con queratocono, degeneración pelúcida, cirugías refractivas fallidas o afecciones autoinmunes—, los lentes esclerales representan una oportunidad no solo clínica, sino también humana. Su correcta adaptación transforma la vida de personas que han perdido la esperanza de ver con nitidez o de recuperar la comodidad ocular.
Conclusión
Los lentes esclerales son más que una herramienta de corrección visual: son una oportunidad para el profesional de liderar con conocimiento y sensibilidad. En palabras del Dr. Estrada, se trata de entender que este “pequeño artefacto” puede cambiar por completo la vida del paciente.
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