En el momento de seleccionar la montura adecuada para un niño es importante tener en cuenta el defecto visual, la estructura cráneo facial del niño y las actividades diarias que desarrolla.
Conviene tener en cuenta que las medidas morfológicas cráneofaciales de los niños no son las de un adulto reducido en tamaño, estas estructuras crecen y se trasforman gradualmente durante el periodo infantil hasta alcanzar medidas de un adulto, aproximadamente entre los 12-13 años de edad. Representantes de la empresa Miraflex brindan algunos consejos al respecto.
Material
Para mayor seguridad y comodidad se sugiere para los niños más pequeños, monturas fabricadas en materiales flexibles, livianos, resistentes y sin partes metálicas. En niños grandes se pueden seleccionar otros materiales como el acetato o el nylon.
Tamaño
La montura no debe limitar el campo visual. Su medida debe ser proporcional al tamaño de la cara del niño, no debe ser ni muy grande ni muy pequeña. Los ojos deben estar bien centrados tanto vertical como horizontalmente, cubriendo la ceja. Una montura descentrada crea efectos prismáticos y efectos secundarios impidiendo el correcto desarrollo la agudeza visual en su hijo.
Puente
El 90% del peso de la montura se concentra sobre la nariz del niño, por esta razón, es importante seleccionar una montura cuyo puente (parte de la montura que se apoya sobre la nariz) no sea muy grande ni muy pequeño para evitar que la montura se deslice sobre la superficie nasal o lastime la cresta nasal, impidiendo su correcto desarrollo y crecimiento.
Faja elástica
Los niños siempre están en movimiento (juegan, saltan, hacen deporte), por esta razón se recomienda usar una faja elástica de ajuste para mantener la montura bien centrada al frente de los ojos del niño, brindando una buena visión, comodidad y seguridad durante todas sus actividades diarias.
Fuente: https://miraflex.com.co/alertas.html#ewpopup/3/



